Tratando las aguas grises, podremos disponer de miles de litros de agua limpia al año, gratis.
Existen normativas locales que fomentan el uso de sistemas de tratamiento de aguas, bien sea grises, residuales o pluviales. En algunos municipios reciben subvenciones, y es de prever que en un futuro próximo se desarrollen normativas en las que se fomente cada vez más la reutilización del agua potable y la construcción en todo edificio nuevo de sistemas que aumenten la eficiencia energética y el ahorro de recursos naturales.
Está prohibido utilizar aguas recicladas para la producción de agua potable.